La ciudad petrolera fue por lejos la de mayor volumen de obra pública en los dos últimos años. El aparato económico municipal lo permite, pero el intendente Juan Pablo Luque también se encargó de potenciar los recursos propios con gestiones en Nación.
Luque fue el intendente de Chubut que más pasillos recorrió en Casa Rosada y organismos nacionales.
Lo recibió el presidente de la Nación, Alberto Fernández, en dos oportunidades; los ministros Eduardo “Wado” de Pedro (Interior); Martín Guzmán (Economía); Santiago Cafiero (ex Jefe de Gabinete); Roberto Salvarezza (ex Ciencia y Tecnología); Gabriel Katopodis (Obras Públicas); Matías Kulfas (Producción); Julián Domínguez (Agricultura, Ganadería y Pesca); Carla Vizzotti (Salud); Juan Zabaleta (Desarrollo Social); Daniel Filmus (Ciencia y Tecnología); y Jorge Ferraresi (Desarrollo Territorial), entre otros.
A todos le “sacó” algo y volvió a Comodoro con anuncios. Luque es el “niño mimado” de Nación en la política chubutense y el intendente utilizó la sintonía fina para conseguir obras millonarias.
En estos dos años, Comodoro Rivadavia sufrió una transformación pocas veces vista. La catástrofe climática en 2017, también ayudó a que toda la atención política esté puesta en esa reparación obligada que necesitaban los vecinos de la ciudad petrolera.
Comenzó con Carlos Linares, a quien le tocó sufrir el embate de una inundación sin precedentes. Vio como la ciudad se resquebrajaba con el paso del agua. Luque profundizó y potenció lo que había iniciado el ahora senador del Frente de Todos, pero con un condimento diferente: El actual intendente gestionó con un Gobierno nacional del mismo espacio. A Linares le tocó con Mauricio Macri como presidente.
Una de las virtudes de la actual gestión municipal es que está logrando romper con el prejuicio de “ciudad petrolera” y extrapolarlo a conceptos relacionados con turismo, espacios públicos, centro comercial, mejora en la transitabilidad y trazabilidad.
A fuerza de obra pública, Comodoro Rivadavia está saliendo paulatinamente de la lógica hidrocarburífera. Lo está haciendo con una pandemia de por medio, pero lentamente se va transformando en una ciudad “más amigable”.
“Una ciudad de cara al mar”, repitió Luque durante estos poco más de dos años de gestión al frente del municipio. Por ese camino van. El Paseo Costero, las obras de embellecimiento, espacios verdes, canchas de césped sintético para desarrollar el Hockey y el Fútbol, canchas de básquet y el Centro Comercial a cielo abierto sobre la 9 de Julio explican estos cambios de paradigmas que buscan para la ciudad.


Las plazas de Juan XXIII, el parque histórico de Km. 8, obras para ponerle fin y dar vuelta la página del temporal que tanta angustia y desesperación generó, el canal de la Avenida Roca, los pluviales de Moure y San Cayetano y el reservorio N° en el Barrio Malvinas Argentinas, son algunas de las tantas obras que pusieron en marcha en Comodoro Rivadavia.
Comodoro Rivadavia cumple 121 años y tiene motivos para celebrar. Del temporal que azotó y destruyó miles de ilusiones aún quedan vestigios. Fue un trago amargo. De esos que son duros de digerir. Pero las sociedades siempre se levantan y Comodoro va por ese camino.